Elegir la tabla adecuada
En un principio, lo ideal es tener una tabla grande y
flotadora, de preferencia con punta redondeada, para lograr más estabilidad
cuando recién comenzamos en esta experiencia y coger olas sin sufrir repetidos
golpes. La tabla longboard es ideal para principiantes.
Además, procura no empezar con tablas prestadas, pues si
recibimos el objeto de un amigo experimentado, la dificultad en el aprendizaje
se multiplicará y nosotros, no encontraremos motivación para seguir aprendiendo
a surfear.
Las condiciones climáticas
En un principio, es recomendable meterse al agua en días
calmados, cuando las olas no son tan fuertes y el movimiento menor del agua nos
permite maniobrar con la tabla con mayor facilidad. Además, es importante
evitar momentos pico en las playas, porque es en estos momentos cuando más
gente hay alrededor y no podemos remar tranquilos y movernos ampliamente en el
agua, lo cual es fundamental para aprender.
Primeros pasos
Lo primero que el principiante debe hacer es atar la cuerda
(leash) al tobillo antes de entrar al agua, después deberemos remar, hasta
pasar la zona donde rompen las olas y practicar sentarse en la tabla y
acostarse, de manera de aprender a usar la misma y captar sus movimientos.
Posteriormente a lograr sentarse en la tabla y mantenerse en
esta posición por algún tiempo, debemos situarnos en el mar a cierta distancia
de la costa y remar en dirección a esta hasta que una ola o la espuma de ésta
te alcance. En este momento debes continuar remando hasta que sientas que la
ola te impulsa que es, precisamente, el momento en que debes tratar de
incorporarte con un solo movimiento.
Para pararte en la tabla, debes ayudarte con las manos
apoyándolas sobre la misma pero sin agarrarse de los bordes, e intentar caer
(como después de un salto) sobre la tabla con los dos pies, uno irá por delante
del otro. Nunca se recomienda incorporarse en dos movimientos, es decir, no es
útil arrodillarse y después pararse o apoyar primero un pie y después el otro.
En un comienzo, al pararse por primera vez, es recomendable
quedar algo agachado, tirar los hombros ligeramente hacia adelante y flexionar
un poco las rodillas, de manera de coger más equilibrio para mantenerse en pie
sobre la tabla.
Éstos consejos sencillos para principiantes pueden ayudar a
lograr un mejor aprendizaje cuando intentamos surfear y disfrutar de la
adrenalina que experimenta el surfista experimentado cuando navega de pie sobre
las olas. ¡Ánimo! Y por sobre todo, paciencia.
Para que quede más claro os dejamos unos vídeo explicativos
bastante interesantes:
No hay comentarios:
Publicar un comentario